Presentación de Cervezas Checas

La semana pasada pudimos asistir unos cuantos privilegiados a una presentación en la residencia de la embajadora de la República Checa Katerina Lukesova, organizada por Carlos Vazquez, del grupo Xiata, importadores de cerveza checa.

Al evento acudió Thomas Radil, de la cervecera Bernard, que presentó su fábrica y sus productos (y luego, en la post-fiesta en el Oldenburg nos enseñó la presentación de ordenador que no pudo poner allí, por ser al aire libre). Y los importadores contaron con nuestro amigo Juan Antonio Barrado, que describió las cervezas de Pivovary Lobkowicz, con el que también trabajan.

Podríamos decir que, dentro de los varios estilos y marcas que se presentaban, todas buscan hacer un producto tradicional y de calidad, manteniendo las técnicas típicas de la zona (rica en la variedad de influencias) tales como la decocción doble, el separar la fermentación y el lagering o incluso el no pasteurizar y acondicionar en botella.

Una vez descritas las cervezas, pasamos a probarlas, claro, que es lo mejor de la cerveza. Está muy bien que te hablen de ella, o leer sobre ella (como en los blogs) pero no hay nada mejor que probarla por uno mismo.

Y en barril pudimos saborear la Platan 11º, de 4.6 %, muy fácil de beber y refrescante (y de la que luego repetiríamos en el Oldenburg , en la jornada de tarde) y dos Bernard, una rubia y otra oscura, ambas lager (creo que eran la Sváteční Ležák y la Černý Ležák 12°, respectivamente).

Además, de botella había más, incluyendo una interesante Klášter Klášterní-Bock, de 7,5% ABV, y una cerveza de trigo checa (la primera que pruebo de allí) llamada Černá Hora Velen, de 6%, y más intensa que el trigo alemán habitual. Ah, y todo ello acompañado de rico embutido y deliciosos torreznillos.

Después de la comida y de estar un rato en L’Europe, nos reunimos como hemos dicho en el Oldenburg, donde pudimos disfrutar de la Platan 11º que habíamos tomado antes y de la Prácheňská Perla 14º, en barril, con otros blogueros, los chicos de The Better Beer Company y los organizadores.

Y la conclusión a la que podemos llegar es que son cervezas muy agradables y fáciles de beber, sobre todo las de baja densidad, con lo cual no nos extraña que la República Checa sea el país con más consumo de cerveza por habitante del mundo. ¡Si es que entran solas! Así que habrá que hacerles una visita en el futuro.