En el vídeo de hoy explicamos por qué hay cervezas que no son aptas para vegetarianos o veganos, y cuáles son los ingredientes de origen animal o los adjuntos que pueden llevar y que las sacan de su dieta. Porque si pensaban que todas las cervezas eran vegetarianas, estabas en un error.
Es cierto que la mayoría lo son, pero puede que no. Y lo peor es que no están obligados a ponerlo en la información obligatoria del etiquetado… así que puede que no lo sepas. Si ves el vídeo sabrás por qué, y diremos algunas marcas de cerveza vegana o vegetariana de España y Europa. ¡No te lo pierdas!
Más información:
Praga Premium Pils
Sí, esta cerveza se llama Praga. Como la capital de la República Checa. Y está hecha en República Checa, pero no en Praga. La marca es relativamente reciente (desde 2004) y con sede en České Budějovice, pero hemos visto que se ha elaborado tanto en Pivovar Samson como en Pivovar Litovel.
La cosa es que prometen un auténtico sabor checo para la exportación. Cosa que está bien, pero compite con otras muy grandes cerveceras. ¿Podrá competir a la altura de una Urquell o una Budvar checa? Veamos…
De aspecto es clara y dorada, con una espuma blanca ,cremosa, de cantidad media-baja pero buena persistencia. Tiene un aroma fresco y floral, con notas de cereal y lúpulo herbal, que no está mal.
En boca encontramos las mismas notas de hierba, paja y una maltosidad dulce que predomina al principio del trago, pero que le sigue amargor suave y persistente que le da a la cerveza un final seco y limpio.
Es correcta. Muy correcta. Pero no destacable. Hay cervezas checas con mucho más interés y más llamativas para los sentidos. Eso sí, con solo 4,7% vol. de alcohol y en medio litro, es el acompañamiento ideal para un montado de oreja a la plancha. Prometido.
“Mi opinión en un Tweet:” No viajes a Praga buscando esta birra. Nota: Suficiente alto.
La cosa es que prometen un auténtico sabor checo para la exportación. Cosa que está bien, pero compite con otras muy grandes cerveceras. ¿Podrá competir a la altura de una Urquell o una Budvar checa? Veamos…
De aspecto es clara y dorada, con una espuma blanca ,cremosa, de cantidad media-baja pero buena persistencia. Tiene un aroma fresco y floral, con notas de cereal y lúpulo herbal, que no está mal.
En boca encontramos las mismas notas de hierba, paja y una maltosidad dulce que predomina al principio del trago, pero que le sigue amargor suave y persistente que le da a la cerveza un final seco y limpio.
Es correcta. Muy correcta. Pero no destacable. Hay cervezas checas con mucho más interés y más llamativas para los sentidos. Eso sí, con solo 4,7% vol. de alcohol y en medio litro, es el acompañamiento ideal para un montado de oreja a la plancha. Prometido.
“Mi opinión en un Tweet:” No viajes a Praga buscando esta birra. Nota: Suficiente alto.
Premios de Invierno 2023
Acaba este invierno atípico (por lo elevado de sus temperaturas medias) y entra oficialmente una primavera que parece que ya hace días que nos acompaña. Pero el salto en el calendario nos trae la recopilación recurrente de lo mejor de la estación en… ¡Los Premios de Invierno 2023 de El Jardín del Lúpulo!
Cervezas más recomendables:
Botella de Bronce:
Basqueland Imparable
Botella de Plata:
DouGall's IPA4
Botella de Oro:
De Ranke Guldenberg
Medalla a la Mejor Entrada de Entretenimiento:
Reto Cervecero 2023: #LaVueltaen12Birras
Medalla a la Mejor Entrada Divulgativa:
Top 10 Cervezas Españolas de 2022 (en Untappd)
Como podéis ver ha sido realmente atípico. Tres cervezas rubias, dos de ellas lupuladas… es muy poco invernal. Pero las cosas a veces vienen así. Y no hay cerveza que no pegue si las condiciones son las adecuadas. Así que a ver con qué nos sorprende el resumen de la primavera, dentro de tres meses.
Cervezas más recomendables:
Botella de Bronce:
Basqueland Imparable
Botella de Plata:
DouGall's IPA4
Botella de Oro:
De Ranke Guldenberg
Medalla a la Mejor Entrada de Entretenimiento:
Reto Cervecero 2023: #LaVueltaen12Birras
Medalla a la Mejor Entrada Divulgativa:
Top 10 Cervezas Españolas de 2022 (en Untappd)
Como podéis ver ha sido realmente atípico. Tres cervezas rubias, dos de ellas lupuladas… es muy poco invernal. Pero las cosas a veces vienen así. Y no hay cerveza que no pegue si las condiciones son las adecuadas. Así que a ver con qué nos sorprende el resumen de la primavera, dentro de tres meses.
Sábado Cervecero Animado (95)
Ayer fue San Patricio (St Patrick's Day para los angloparlantes). Y como santo patrón de Irlanda, su onomástica se ha convertido en una excusa para salir, celebrar, beber cerveza negra o verde, y en general, pasarlo bien. ¡Gracias por expulsar a las serpientes para esto!
Seguro que muchos de vosotros, por solidaridad con los naturales de Eire, ayer lo celebrasteis aunque fuese un poquito. Y hacéis bien, porque como dice Michael Scott: “Es lo más cerca que estarán los irlandeses de la Navidad”.
Seguro que muchos de vosotros, por solidaridad con los naturales de Eire, ayer lo celebrasteis aunque fuese un poquito. Y hacéis bien, porque como dice Michael Scott: “Es lo más cerca que estarán los irlandeses de la Navidad”.
Chouffe Sin Alcohol
Bueno, o “sans alcool” o “alcoholvrij”. Pero para que nos entendáis lo hemos puesto en castellano que es más sencillo. Y es otra más de las versiones sin alcohol de marcas clásicas que van apareciendo y vamos probando. Y como hacía mucho que no comentábamos una SIN (aunque en Youtube hicimos un vídeo hablando de las mejores cervezas sin alcohol) os la traemos a ver qué tal.
De la Brasserie d'Achouffe teníamos altas expectativas. La mayoría de sus cervezas son buenas… y quizá los estilos belgas son candidatos aceptables a hacer buenas cervezas de bajo contenido alcohólico, ya que el dulzor es uno de sus parámetros habituales.
Pero hemos de reconocer que en esta, después de la fase visual, todo se nos queda corto. ¡Perdón por el spoiler! No nos adelantemos. A ver… Es una cerveza rubia, de brillos anaranjados, limpia y cristalina casi del todo, y que culmina coronada por espuma blanca de consistencia y permanencia medias.
Lo que pasa es que tanto en nariz como en boca destacan las notas a mosto sin fermentar. Vale, quizá tiene algún toque especiado de su carácter belga, pero no esconde en absoluto ser una cerveza sin alcohol… por lo que para eso, encontramos otras opciones más baratas.
Y es que usa una levadura especial que apenas transforma los azúcares en alcohol (consiguiendo un bajo 0,4% vol.) y claro, esa maltosa se nota ahí disuelta. Así que el gnomo lo que tiene para estar flotando es más bien un subidón de azúcares.
“Mi opinión en un Tweet:” Otra sin que sabe a sin. Nota: Suficiente.
De la Brasserie d'Achouffe teníamos altas expectativas. La mayoría de sus cervezas son buenas… y quizá los estilos belgas son candidatos aceptables a hacer buenas cervezas de bajo contenido alcohólico, ya que el dulzor es uno de sus parámetros habituales.
Pero hemos de reconocer que en esta, después de la fase visual, todo se nos queda corto. ¡Perdón por el spoiler! No nos adelantemos. A ver… Es una cerveza rubia, de brillos anaranjados, limpia y cristalina casi del todo, y que culmina coronada por espuma blanca de consistencia y permanencia medias.
Lo que pasa es que tanto en nariz como en boca destacan las notas a mosto sin fermentar. Vale, quizá tiene algún toque especiado de su carácter belga, pero no esconde en absoluto ser una cerveza sin alcohol… por lo que para eso, encontramos otras opciones más baratas.
Y es que usa una levadura especial que apenas transforma los azúcares en alcohol (consiguiendo un bajo 0,4% vol.) y claro, esa maltosa se nota ahí disuelta. Así que el gnomo lo que tiene para estar flotando es más bien un subidón de azúcares.
“Mi opinión en un Tweet:” Otra sin que sabe a sin. Nota: Suficiente.
Carta de Aromas: Butírico
En esta ocasión nos hemos saltado la norma de poner el descriptor (o sea, a lo que huele) en el título y hemos puesto el nombre científico del responsable (ácido butírico), que resulta menos desagradable que el olor que nos recuerda: vómito de bebé.
Y es que hay cervezas que, si la colonia de bacterias inapropiadas se ha colado en ellas (o apropiadas, es una de las que se encuentran dentro de la flora espontánea de la Lindemans Faro, por ejemplo) presentan este aroma que puede llegar a ser muy desagradable. Aunque también puede deberse a que queden muchos almidones no transformados.
La cosa es que al final huele a leche agria, mantequilla rancia o vómito de bebé. Podéis aprenderlo buscando una de esas tres cosas (si tenéis un bebé en casa no os preocupéis, os proveerá antes o después) o probando la cerveza antes mencionada.
Porque recordad que para reconocer un aroma es imprescindible haberlo olido antes y tenerlo almacenado en nuestra biblioteca mental. Si no, puede que lo detectes, pero es imposible que lo identifiques por ti solo. ¡Así que a oler bebés si no lo habéis hecho!
Y es que hay cervezas que, si la colonia de bacterias inapropiadas se ha colado en ellas (o apropiadas, es una de las que se encuentran dentro de la flora espontánea de la Lindemans Faro, por ejemplo) presentan este aroma que puede llegar a ser muy desagradable. Aunque también puede deberse a que queden muchos almidones no transformados.
La cosa es que al final huele a leche agria, mantequilla rancia o vómito de bebé. Podéis aprenderlo buscando una de esas tres cosas (si tenéis un bebé en casa no os preocupéis, os proveerá antes o después) o probando la cerveza antes mencionada.
Porque recordad que para reconocer un aroma es imprescindible haberlo olido antes y tenerlo almacenado en nuestra biblioteca mental. Si no, puede que lo detectes, pero es imposible que lo identifiques por ti solo. ¡Así que a oler bebés si no lo habéis hecho!
La Cerveza en el Arte: Adriaen Brouwer (2)
Hoy os traemos otra entrega del pintor flamenco que aplicó la máxima de vivir rápido, morir joven y acumular una extensa recopilación de vicios. Vicios que se dedicó a plasmar en sus obras, donde abundan fumadores, bebedores, jugadores y gente en la taberna.
Y es que así se llama el cuadro que elegimos hoy para nuestra pinacoteca: “Eine Trinkstube”, que hemos visto traducido como “In the Tavern” o “Une taverne”, pero nos gusta más lo que google nos propone: “Un bebedero”.
En él se ve como un borrachuzo alza con solemnidad digna de una ceremonia religiosa un gran vaso de cerveza frente al resto de feligreses y parroquianos de su mesa. Con los que probablemente luego fumará, jugará a las cartas y resolverán sus amistosas disputas a cuchillo.
Esta obra de 35,5 x 27,1 cm, pintada por Adriaen Brouwer sobre tabla en torno al año 1635, pertenece a las colecciones de pintura del estado bávaro que pueden verse en el museo de la Alte Pinakothek, de Múnich. Por si os pilla de paso.
Augustiner Weissbier
Coged las maletas que nos vamos a Múnich. Bueno, nosotros en verano, de verdad. Pero ahora metafóricamente, de manera virtual. A visitar la fábrica que es más antigua del casco urbano de Munchen, fundada en 1328 por unos monjes agustinos, claramente.
Después fue un negocio familiar, y ahora pertenece en su mayoría a una fundación sin ánimos de lucro llamada Edith-Haberland-Wagner, tal y como quiso la familia. Al ser de la ciudad, es una de las cerveceras que pueden servir sus birras en la Oktoberfest.
Y hoy vamos a hablar de la de trigo, de apariencia turbia por estar sin filtrar y color entre dorado y anaranjado, con abundante espuma blanco roto. Queda muy bonita servida en los largos vasos en los que se beben tradicionalmente las Weizenbier.
En aroma presenta notas a plátano y clavo, típicas de este estilo. Y pese a ser una cerveza dulce, resulta refrescante y ligera, con un sabor suave a trigo y de nuevo notas de plátano y levadura. Tiene carbonatación media y la textura es cremosa, por su densidad.
Con 5,4% vol. de alcohol es una buena cerveza para venir en formato de medio litro, ya que cualquier cosa más pequeña se puede hacer corta. Y si la usas para regar unas salchichas currywurst, pues es posible que necesites al menos dos.
“Mi opinión en un Tweet:” ¿Podemos repetir ya el chiste de quedarse agustiner? Nota: Bien.
Después fue un negocio familiar, y ahora pertenece en su mayoría a una fundación sin ánimos de lucro llamada Edith-Haberland-Wagner, tal y como quiso la familia. Al ser de la ciudad, es una de las cerveceras que pueden servir sus birras en la Oktoberfest.
Y hoy vamos a hablar de la de trigo, de apariencia turbia por estar sin filtrar y color entre dorado y anaranjado, con abundante espuma blanco roto. Queda muy bonita servida en los largos vasos en los que se beben tradicionalmente las Weizenbier.
En aroma presenta notas a plátano y clavo, típicas de este estilo. Y pese a ser una cerveza dulce, resulta refrescante y ligera, con un sabor suave a trigo y de nuevo notas de plátano y levadura. Tiene carbonatación media y la textura es cremosa, por su densidad.
Con 5,4% vol. de alcohol es una buena cerveza para venir en formato de medio litro, ya que cualquier cosa más pequeña se puede hacer corta. Y si la usas para regar unas salchichas currywurst, pues es posible que necesites al menos dos.
“Mi opinión en un Tweet:” ¿Podemos repetir ya el chiste de quedarse agustiner? Nota: Bien.
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