Las IPAs del Infinito: Subcategorías de India Pale Ale

Las IPAs del Infinito: Subcategorías de India Pale Ale

Al reinar el lúpulo y las IPAs como punta de lanza del movimiento de cerveza craft, artesana o diferente, el estilo original de IPA que recibió su nombre en el Reino Unido ha quedado relegado a una cosa muy “old school” y han surgido una variedad de cervezas con el apellido IPA casi infinitas (de ahí la referencia a la película de Vengadores). Veamos algunos de los más conocidos:

English IPA
El origen del estilo. En estas, India Pale Ale sí que hace una mención etimológica a su origen. Eran cervezas pálidas de tipo Ale que se hacían para la India. Un poco más alcohólicas y con más lúpulo que las Pale Ale normales de UK. Pero en términos modernos… “sosas”.
American IPA
La versión americana de una IPA. Aún más alcohol y más lúpulo. Obviamente, los lúpulos son de origen estadounidense, con perfiles más aromáticos y tienen menos maltosidad y cuerpo que sus primas del viejo mundo. Y más lúpulo.
Black IPA
Se supone que son IPAs en las que se han usado maltas oscuras para cambiarles el color, pero sin alterar (demasiado) el aroma o el sabor. La verdad es que acaban siendo cervezas negras muy lupuladas, con un perfil más parecido al de una Porter… pero con carretadas de lúpulo.
White IPA
En este caso, el White no hace referencia tanto al color en sí mismo (ya que se entiende que el estilo ya es pálido) sino a los ingredientes, que comparte con una Witbier o Weissbier (que también significan blanco). Vamos, que lleva trigo (y puede llevar las especias típicas de las Blanche belgas). Y, obviamente, lúpulo.
Rye IPA
Esta subcategoría de IPAs también tiene un ingrediente propio. En este caso, el centeno, habitualmente malteado. Este le da un toque más especiado y seco, resaltando el amargor del lúpulo (que, como en las demás, es abundante).
Red IPA
En esta variedad de IPAs, no hay ingredientes especiales. Lleva los mismos que una American IPA, pero con mayor presencia de maltas especiales, lo que le da más color y un perfil más a caramelo. Pero, por supuesto, el protagonismo lo sigue teniendo el lúpulo.
Belgian IPA
La versión con toques belgas de una American IPA. Se caracterizan sobre todo por el uso de levaduras belgas que le dan un toque más especiado, terroso y frutal que la levadura inglesa más limpia. Además, tienen cierto toque a Strong Golden Ale, característico. Pero con más lúpulo, claro.
Session IPA
Las cervezas de “sesión” son aquellas cuya baja graduación y buen equilibrio hacen que se puedan beber en abundancia y sin acabar perjudicado. Las Session IPAs, por tanto, se caracterizan por su menor ABV, pero ojo: esto suele hacer destacar más los IBUs, restando bebestibilidad si pierden el equilibrio por mantener un perfil muy lupulado.
Double IPA
Por otro lado, las Double IPA (también llamadas Imperial IPA) son la versión más potente de las American IPA. Con mucho más alcohol, cuerpo y amargor, parecen casi Barleywine a los que se les hubiese arrojado un camión de lúpulo. Pero deberían tener un trago más fácil que esas.
West Coast IPA
Dentro de las American IPA, en California y en general en la costa Oeste, empezaron a hacerse versiones más tendentes al lúpulo, con un perfil de malta que resaltase más asertivamente el perfil del lúpulo. Muy amargas, cítricas y resinosas, fueron las reinas del panorama una temporada.
NEIPA
Nacidas hace relativamente poco en Nueva Inglaterra (en el Nor-Este), las New England IPA buscan enfatizar el lúpulo más en el aroma y en el sabor que en el amargor. Así, son más frutales y suaves que las “viejas” American IPA, muchas veces recordando a zumos. Lo que han contagiado a las demás ha sido su aspecto turbio y el uso indiscriminado del DryHopping (aplicado al doble, DDH).
Brut IPA
Y como última aparición (al menos hasta el momento) en el mundo de las cervezas altamente lupuladas (porque IPA ya no significa otra cosa), han llegado las Brut IPA, para diferenciarse radicalmente de las anteriores (NEIPA). Con el uso de levaduras especiales y enzimas que degradan los azúcares, buscan un perfil seco y un aspecto limpio, recuperando parte de lo que las Hazy IPAs habían dejado atrás.

Como podéis ver, los estilos que llevan el apelativo IPA son muchos y muy variados (y posiblemente nos hayamos dejado en el tintero alguno, avisadnos si eso). En ellos cambian sus aromas, sus alcoholes, sus amargores, sus colores… Pero todos comparten dos cosas en común: tienen mucho lúpulo y se venden mejor que otros estilos. Pero quizá son demasiados y se solapan unos con otros hasta dejar las fronteras muy poco claras… ¡Tal vez Thanos debería chasquear sus dedos aquí!

Lúpulo: Hersbruker

Casi todos los lúpulos que acaben en “-er” son de origen alemán: esa partícula es como el sufijo que indica un gentilicio. Como en “-ense”. En este caso, significa que este lúpulo es natural de Hersbruck, al este de Núremberg, un poco al norte de la región más lupulera: Hallertau.

Lúpulo: Hersbruker
Comparte algunas similitudes con los lúpulos nobles, como su escasa Cohumulona y su bajo amargor potencial, ya que sólo tiene entre un 2% y un 5% de alfa ácidos. Es por eso que se considera un lúpulo de aroma.

Y los aromas que imparte son bastante clásicos: florales, especiados y levemente afrutados. Ideal para estilos germanos como Lager, Kolsch, Munich Helles, Pilsner, Weissbier, Bock, o cervezas estilo belga como las Blonde o las Strong Golden Ale.

Este lúpulo se popularizó en el siglo pasado como sustituto de algunos Hallertauer por su mejor resistencia a la verticilosis. Aunque su aguante en el tiempo no es muy extenso, mejor usarlo cuanto antes. Y si no tienes, puedes sustituirlo por Liberty o Hallertauer Mittelfrüh. Y si quieres encontrarlo en alguna cerveza, lo tienen tanto la The Crafty Brewing Irish Lager como la Coopers Extra Strong Vintage.

Debate: La Memoria Cervecera

Queremos traer a la mesa de debate en la que nos metemos en profundos jardines cerveceros (nada que ver con los Biergarten alemanes como el de este cuadro) una reflexión que comentábamos el otro día en la barra de un bar (donde suelen nacer los debates que luego compartimos en EJDL).

Mirábamos atentos la pizarra de cervezas (“pizarra” digital, a la última, en un bar moderno) y nos dimos cuenta, al ir a comentar qué pedíamos, de que cada vez prestamos (al menos nosotros) menos atención al nombre de la cerveza, y más a la marca o al estilo.

Vamos, que nos fijamos en cosas como “la Session de Dougalls”, “la Imperial de Drunken” o “la ácida con fruta de Flying Inn” antes que en si su nombre es “Nosequé” o “Nosecuál”. Y tenemos la teoría de que se debe (como tantas cosas malas de este mundo cervecero del siglo XXI) a la avalancha continua de novedades que jamás se vuelven a repetir.

O sea… ¿para qué molestarse si quiera en mencionar o aprenderse el nombre, si esa cerveza no va a volver a salir al mercado? A veces parece que carece de sentido incluso a la hora de pedirlas en la barra. A lo que ayuda que es más fácil decir el número del tirador, que al final es lo que importa al camarero. ¿Os pasa a vosotros lo mismo? ¿Tenéis esta sensación de futilidad con los nombres de las birras?

Dark Horse Too Cream Stout

Creíamos que esta cerveza venida desde Michigan (EEUU) y elaborada por Dark Horse era una de esas que bebemos, catamos, anotamos… y jamás ven la luz (porque bebemos mucho más de lo que da tiempo a publicar aquí) porque no las volvemos a ver en el mercado (y por tanto preferimos priorizar la publicación de aquellas cervezas que se encuentran con más continuidad). ¡Pero las hemos vuelto a ver en los bares, y bien se merecen que reseñemos alguna de las de su serie de Stout.

Dark Horse Too Cream Stout
Esta, la Too Cream Stout, es la segunda, como su propio nombre indica (o parece indicar). Una Milk Stout con lactosa, de 7,5% ABV y de color negro, con una cabeza de espuma marrón, escasa pero bastante compacta y de buena persistencia.

Su aroma es principalmente maltoso, pero sin saturar; chocolate y café se juntan, como un espresso con hielo. En boca es cremosa y amarga. Maltas tostadas, dulzor residual, algo de amargor terroso del lúpulo… Un buen ejemplo de una Sweet Stout americana.

Está rica y nos gusta... Pero nuestra favorita de su serie de Stouts es otra, la cuatro. ¿Sabéis cuál es? Bueno, otro día os lo contamos. Hoy toca recomendar esta y maridarla con sashimis o niguiris. ¡Es nuestro plato favorito con las cervezas negras!

“Mi opinión en un Tweet:” Nunca algo es demasiado cremoso. ¡Y menos una cerveza! Nota: Notable alto.

The Beer Times (285)

Dominical suplemento de noticias sobre cerveza. Aquí puedes leer el periódico The Beer Times.

Cualquier excusa es buena para beber una birra: por ejemplo, leer estos enlaces sobre cervezas.

Cambiando de Tercio: Un Podcast de comedia regado con cerveza.

Hace no mucho, nos llamó nuestro amigo Miguel Iribar para decirnos que iba a comenzar a grabar un programa llamado “Cambiando de tercio”, con un formato nocturno de entrevistas a personajes de la comedia, el arte y la cultura, botellín de cerveza en mano.

Y ahí nos pedía ayuda, ya que reconocía no saber mucho de cerveza y quería consejos y algo de información. ¡Y cómo no le vamos a echar una mano! Así que ahora, sus invitados, para dar rienda suelta a sus charlas tienen un buen tercio de cerveza.

Entre ellos han estado ya Nacho García, monologuista y cómico profesional, e Ignatius Farray, muy conocido desde hace años y que ahora está en La resistencia y La vida moderna, con David Broncano. Y próximamente estarán Edu Galán, uno de los creadores de la revista satírica Mongolia, y Marta Flich, famosa por sus vídeos sobre economía del Huffington Post y por su presencia en programas de televisión como Ese programa del que usted me habla o Todo es mentira.

Obviamente, os recomendamos seguirlo en Youtube, suscribiros y eso; y comentar hablando de cerveza para hacerles vuestras recomendaciones o enseñarles, porque aún les queda mucho que descubrir y aprender.

Tatuajes Cerveceros (11)

Seguimos retomando con algo de cadencia la sección de tatuajes de temática cervecera. La comenzamos con el año escolar, ya estamos entrando en el final del segundo trimestre… ¡Y todavía no llegamos ni a la mitad de los que nos habéis mandado! A este paso, nos queda para el año que viene…

El turno de hoy es para el tatuaje cervecero de Oscar Gómez, de Getxo (Bizkaia), que tiene 46 años. Es, hasta ahora, nuestro tatuado más veterano, cosa que nos mola. Y se nota, creemos, en el diseño elegido, en clara referencia a los ingredientes básicos de la cerveza.

Se lo hizo tras muchísimo tiempo dándole vueltas a qué tatuarse, apostando al final por algo relacionado con su pasión desde que a los 14 años probase su primera cerveza. ¿Y a quién no le pasó eso? Bueno, tal vez la primera primera cerveza, no, pero la segunda…

Recordad que, si os gusta la cerveza (por algo leéis El Jardín) y os la habéis tatuado en la piel, esta sección está abierta para vosotros. ¡Mandadnos vuestro Beer Tattoo y lo pondremos aquí! Los demás lectores también quieren verlo.

La Cerveza en el Arte: Max Liebermann (1)

Biergarten München de Max Liebermann

La cuna de la cerveza, tal y como la conocemos hoy en día, es Centroeuropa. Los Biergarten alemanes fueron (y son) centro de reunión y de solaz para la población germana. Y el cuadro protagonizado por la cerveza que os traemos hoy lo refleja.

Max Liebermann, el autor berlinés, refleja en esta obra de óleo sobre tabla de 95 x 68,5 cm, pintada en 1884, el aspecto tranquilo (pese a la música de fondo) y familiar de uno de estos jardines cerveceros; probablemente el de Augustinerkeller. Como curiosidad: en los Biergarten de Munich, sin embargo, no se permitía la música ni la venta de comidas. Es una licencia artística.

Münchner Biergarten, que se podría traducir como “Jardín cervecero en Múnich”, es una obra que se puede ver en la Neue Pinakothek, museo centrado en el arte europeo del siglo XIX y que también está en Múnich, Alemania.

Y, como nota final, aclarar que estamos casi seguros (ante la posible censura del Siglo XXI) de que la niña del vestido rojo está bebiendo agua, no cerveza. Aunque en aquellos tiempos era más sano probablemente beberse un buen mass de Märzenbier.

Nuestro Reto de Febrero 2019 #12meses12barras

Prometemos, a partir del mes que viene, cumplir antes con nuestro reto. ¡Sabemos que muchos no os acordáis de él hasta leernos! Pues que sepáis que nos parece fatal, este año 2019, el reto de cervezas y bares #12meses12barras requiere un poco de planificación.

Nosotros ya hemos pensado los bares de Valladolid que queremos mostraros cada mes… Y en Febrero tocaba “ir a tu cervecería favorita y pedir la birra que más a menudo consumes allí”. ¡Como tenemos muchas cervecerías favoritas a menos de dos manzanas de casa, estaba duro elegir!

Pero al final, Malahierba, que además es un Corner Stone en Valladolid, fue la que elegimos. Mola que tenga la gama de Stone fija al completo, porque la Go To IPA que seleccionamos es una buena cerveza para beber y repetir en cualquier momento, y por eso no es la primera ni será la última vez que sea lo que pedimos allí.

Ya sabéis que si queréis participar para irnos enseñando vuestros bares favoritos y las cervezas que en ellos bebéis, el reto (y el formulario para ir participando) se puede encontrar completo en este enlace. ¡Hay diplomas para los que lo vayan completando!

Belle Vue Gueuze Lambic

Es curioso ver como en las webs de rating cervecero las Gueuze belgas reciben un sobresaliente o un muy deficiente como nota, sin apenas términos medios. Esto va en función (básicamente) de si siguen los procesos tradicionales o están endulzadas para el público generalista.

Belle Vue Gueuze Lambic
Esta es de las segundas, obviamente, ya que son las que hacen las fábricas que más presencia tuvieron durante las últimas décadas en los mercados. Belle-Vue, que se asoció con Artois, ahora es propiedad de AB-InBev. Y aunque no hagan Lambic tradicional, su producto resulta aceptable.

Una cerveza de color ámbar claro, pero profundo, con una buena cabeza de espuma. El olor es leve, con notas a establo no muy intensas. Y el sabor, sin apenas acidez, es predominantemente dulce, acaramelado, con notas especiadas (lleva, como las Witbier, trigo crudo, cilantro y cáscara de naranja).

La verdad es que de espontánea no tiene más que un leve rastro en el aroma, pero esta cerveza de 5,5% ABV se bebe sola y resulta refrescante. Tampoco es para ponerla un suspenso como una casa, creemos.

“Mi opinión en un Tweet:” Por ser dulce no merece un donut en la calificación. Nota: Suficiente raspado.

The Beer Times (284)

Dominical suplemento de noticias sobre cerveza. Aquí puedes leer el periódico The Beer Times.

No desesperes porque mañana sea lunes, hoy es domingo y hay tiempo para leer enlaces sobre cervezas.

Sábado Cervecero Animado (51)

Hoy hace un día excepcional para ir a esquiar o hacer snowboard. Los partes de nieve son buenos, la temperatura agradable, hay cervezas ricas en lata que llevar en la mochila para el descanso…

¿Por qué entonces no estamos haciendo como esta gente que os traemos hoy en esta sección? Unir nuestras pasiones e ir sobre las tablas directos a beber una cerveza. Que, como todo el mundo sabe, entra mejor en altura.

De Molen Bloed, Zweet & Tranen

Esta cerveza es de De Molen, una cervecera de los Países Bajos que ha salido hace poco en las noticias cerveceras ya que la “Swinkels Family Brewers” (conocidos sobre todo por Bavaria) ha adquirido el 100% de la empresa, tras entrar con el 35% hace un par de años.

Especializados en cervezas negras, es algo (en sus propias palabras) a camino entre una Porter y una Stout, pero de 8,2% ABV y con una buena carga de maltas ahumadas. De color es negra densa. Y su espuma, escasa y beis. Poco persistente.

Olor a panceta ahumada, a chimenea y cenizas. El sabor es más raro y complejo. Turba, tabaco en hebras, y suela de zapato (goma o caucho), con amargor y dulzor mezclados, muy de chocolate. Con muchas cosas dentro, pero sobre todo, ahumados, claro.

No sería exagerado decir que lleva “Sangre, Sudor y Lágrimas”, como indica su nombre en la etiqueta. O que cuesta eso acabártela como no te pille del humor adecuado. Pero lo cierto es que es una cerveza con personalidad.

“Mi opinión en un Tweet:” Si eres un friki de la historia sabrás sin esfuerzo que la frase no fue exactamente así. Nota: Bien bajo.

Cine y Cerveza: Colegas de copas

¿Qué se puede esperar de una película cuyo primer plano muestra a una persona vertiendo malta en un molino? ¿y si el segundo plano es de un saco de malta Munich de Weyermann? Las expectativas van subiendo mientras muestran distintas imágenes del proceso de producción de una micro hasta que sale la cerveza por un grifo en un tap-room.

Ahora que tienen toda nuestra atención, ya nos pueden poner el resto de la película de Joe Swanberg (de 2013). Y es que, con una microbrewery de fondo, “Colegas de copas” nos cuenta la historia que surge entre Kate (Olivia Wilde, Tron: Legacy, House MD) y Luke (Jake Johnson, Jurassic World, La Momia), dos compañeros de trabajo de una pequeña fábrica de cerveza que se sienten atraídos a pesar de tener otras parejas.

Podríamos considerar esta película como “romántica” pero con autenticidad. Huyendo de los clichés del género, los personajes son complejos, las situaciones por las que pasan son realistas y el final… bueno, digamos que no es convencional.

Colegas de copas es al cine romántico lo que una cervecera artesana comparada con una industrial; aunque comparten los ingredientes básicos, el cuidado con el que se escogen las materias primas y se vigilan los procesos resulta en un producto mucho más auténtico y atractivo. La contraprestación es que, este tipo de producciones son minoritarias y su difusión queda fuera de los cauces habituales.



Como podéis ver en el tráiler, es una cinta diferente si reniegas de las pelis de amor porque tienes barba, llevas camisas de cuadros y bebes sólo artesanas. Si la trama principal no te atrapa sí lo hará lo verosímil del entorno cervecero en que se desarrolla. ¡Y puede que demuestres tu lado romántico! (Ojo, que aunque sea “indie”, sigue dejando un retrogusto empalagoso que no se olvida, cual Doppelbock o Schwarzbier)

Vocabulario de Cata de Cerveza: Fase Olfativa (1)

Tras haber acabado la fase de cata visual de la cerveza (hablando en estas dos entradas sobre el líquido y la espuma), ahora toca darle vocabulario al siguiente sentido. El olfato. Aunque, para ser precisos, antes queremos dar unos apuntes de cata sobre esta fase.

Catador de cerveza buscando aromas y olores para describirlos.
La cerveza, al tener gas carbónico, pierde los aromas mucho más rápido que otras bebidas. Por lo que en una cata, siempre recomendamos oler la cerveza nada más servirla, porque quizá distingamos cosas que luego se pierden, adelantando la Fase Olfativa a la visual. Y, por otro lado, nuestro olfato es uno de los sentidos más “débiles”. Enseguida se agota y satura. Por ello, el ambiente de la cata debe ser limpio y sin interferencias, y nuestra nariz ha de intentar estar fresca en cada cerveza, usando “trucos” como oler el envés de nuestra propia mano para “resetearla”.

A pesar de ser uno de los sentidos menos entrenados, el olfato es importantísimo para la cata, ya que en gran medida de él dependen también los sabores que encontremos. ¡Y sin embargo, lo peor que nos pasa es que en castellano apenas tenemos vocabulario para los olores! Nos enseñan en el cole los nombres de los colores y los sabores, pero… ¿los olores?

Pues para eso venimos a este “curso” de Vocabulario de Cata. A aprender para definir y explicar los aromas que podemos encontrar en una cerveza. Y para ello vamos a diferenciarlos en tres tipos:

  1. Aromas Primarios: procedentes de los ingredientes de la cerveza, siendo los más predominantes los de la malta o el cereal y los del lúpulo.
  2. Aromas Secundarios: procedentes de la fermentación y el alcohol, como puedan ser los ésteres o los fenoles, entre otros.
  3. Aromas Terciarios: procedentes de la maduración, que pueden ser muy variados según los procesos o la vida de la cerveza, y pueden incluir las oxidaciones o las barricas.

Debate: - IBUs, + Lúpulo

Estos días hemos visto en nuestras redes dos debates sobre este tema, primero propuesto por nuestro amigo Albert y seguido por Daniel, en el que se enfocaba que la batalla por las cervezas con muchos IBUs ha dado paso a las NEIPAs, al DDH y al uso del lúpulo sin dar amargor.

Debate sobre cerveza
Luego se enfocaba como que quizá, cuando se usaba (o abusaba) del lúpulo con resultados de muchos IBUs, se estaba buscando otra cosa, no tanto amargor, sino aromas y sabores.

La verdad es que nos parece un debate interesante. ¿Vosotros qué opináis? Porque, sin quitar parte de razón al tema, tal vez el meollo no esté en el lúpulo en sí, o en buscar agradar a más paladares, sino en las modas y la búsqueda de la diferenciación mediante los extremos.

Lo que está claro es que el lúpulo ha venido para quedarse, en una forma u otra. Y que cada vez hay más maneras de usarlo dando lugar a una variedad infinita de productos lupulados. Quizá el error sea no salir del término IPA para definirlos, cuando hay tanta variedad…

Founders Porter

No hay muchas cervezas negras que se encuentren tan fácilmente en España y estén tan bien valoradas. ¡Está la cuarta en la lista! ¿Cómo puede ser que no la hayamos comentado en el Jardín antes, si hasta entra dentro de los parámetros de craft o artesana para mucha gente?

Viene de Michigan, de una de las marcas estadounidenses (Founders) más prestigiosas, ahora adquirida en parte por el grupo Mahou-San Miguel. Como es una Porter (bueno, Robust Porter, para no confundir con sus primas porter-a-secas del Reino Unido) es negra, bastante densa, con una cabeza beis de espuma, persistente.

Huele mucho a chocolate, maltas tostadas y algo de café. En boca es equilibrada, porque parece que entra dulce y cremosa, pero el final es más seco y con un perfil levemente amargo tanto de notas de cacao como de lúpulo.

No es exactamente barata, pero sí al menos asequible. Y eso, junto con su alcohol no muy alto (6,5% ABV), hace que sea algo que quede al alcance de todo el mundo en su camino a conocer los diferentes estilos de cerveza. O de repetir cuando apetezca.

“Mi opinión en un Tweet:” No tan misteriosa como su etiqueta, mucho más accesible. Nota: Notable alto.

The Beer Times (283)

Dominical suplemento de noticias sobre cerveza. Aquí puedes leer el periódico The Beer Times.

No pasa un solo domingo sin que os hagamos llegar este suplemento semanal lleno de enlaces sobre cervezas.

Resumen: Concurso Homebrewer

Queremos aprovechar el día de hoy para hacer un pequeño resumen a modo de recordatorio de la convocatoria del séptimo Concurso Homebrewer ahora que se van aproximando las fechas finales de la convocatoria de este año. ¡Tomad nota!

El plazo para elaborar es hasta el 28 de este mes, febrero. Y el plazo para inscribir las cervezas y presentarlas es hasta el 15 de marzo. ¡Importante que no se os pase, que os quedáis fuera! Por otro lado, las fechas más previsibles para la cata y la entrega de premios son el 31 de marzo y el 13 de abril, respectivamente, aunque esto aún no os lo podemos confirmar, pero son las que mejor cuadran en un principio.

Tampoco tenemos cerradas las fechas exactas de las recogidas en mano, pero de momento tenemos planeado que haya en Valladolid, en Segovia y por supuesto, en Madrid. Y serán a principios de marzo, claramente. Si os cuadra para ahorraros los gastos de envío, no lo desaprovechéis.

Y bueno, toda la demás información está en la propia web del concurso. No dejéis de participar si hacéis cerveza en casa. Repartimos más de 2500 euros en premios. ¡Y tú puedes ser el afortunado!

Maredsous Blond 6

Hacía meses que no reseñábamos por aquí una cerveza de abadía. Y eso es imperdonable, porque son estilos que forman uno de los pilares básicos sobre los que se sustenta el mundo cervecero actual, y una gran puerta de entrada a los bebedores primerizos (que tienen la suerte de tener mucha más oferta que cuando empezamos nosotros).

Cerveza de abadía Maredsous Blond 6
Esta, la belga Maredsous Blond 6, pertenece al grupo Duvel Moortgat, lo cual es una buena señal ya que suelen cuidar sus productos. De color ámbar claro, algo turbia por el sedimento del fondo, presenta una cabeza no muy abundante de espuma esponjosa.

Huele bastante maltosa y acaramelada, con notas especiadas de la fermentación. El sabor es dulce, con ese toque afrutado belga que las hace tan interesantes y a la vez fáciles de beber. Muy dentro de lo que se espera en una Blonde de abadía.

Otro punto a favor del estilo es que, frente a sus hermanas mayores como puedan ser las Tripel o las Strong Golden Ale, esta sólo tiene 6% ABV (en la gama baja de lo belga), con lo cual las resacas no son tan peligrosas. Aún así, bebed con moderación.

“Mi opinión en un Tweet:” Las abadías siempre dan la campanada. Nota: Notable bajo

Tatuajes Cerveceros (10)

Dicen que tienes cerveza en la piel… y es que estas hecha de lúpulo fino… dicen que tienes… ¡Espera! ¡Que la canción no es así! Ya, ya lo sabemos, pero nos parecía una buena manera de traer el tatuaje sobre cerveza que nos ocupa hoy.

Tatuajes de botella de cerveza con malta
Lo lleva Juan Carlos Cabezón, de 33 años y que es actualmente el propietario de la cervecería Oldenburg en Madrid, uno de los locales más clásicos, y que es sobrino de los antiguos dueños, José Luis e Isabel.

El Oldenburg abrió en Madrid en 1986 (él nació en 1985) así que para él la cerveza y la cervecería es algo que le ha rodeado siempre. El tatuaje con una botella con el nombre escrito fue el regalo de un tatuador y amigo suyo, Musta Hidalgo. Vamos, que lo lleva en la sangre… ¡y ahora en la piel!

Si tú también llevas la cerveza por bandera, mándanos tu tatuaje para que lo podamos incluir en esta sección. Y si aún no lo tienes, esperamos que, cuando se te pase por la cabeza hacerte uno, eches un ojo a los que vamos compartiendo para inspirarte.

Cerveza de Importación en Webs Cerveceras y su Valoración

Hace tiempo hicimos una entrada ponderando la valoración en las webs de rating cervecero de las marcas de cervezas españolas más vendidas (o sea, las pertenecientes a las empresas más grandes y con mayor distribución en supermercados). El resultado fue una nota de 0 a 100 que representaba su “aceptación” entre los usuarios (habitualmente más avanzados y freaks) de estas páginas y apps.

Cerveza Importación en los supermercados. Las mejores en relación calidad/precio.
Hoy queremos repetir lo mismo pero centrándonos en las cervezas de importación que más a menudo se encuentran en los supermercados (hablando sobre todo en las grandes superficies como Hipercor o Carrefour, además de los más conocidos como Día, Gadis o demás).

La lista es mucho más extensa que la otra vez, claro. Y las puntuaciones varían más. Por eso no hemos puesto todas todas, pero sí que hemos querido mostrar las mejor valoradas, las peor, y las que parecen tener una mejor relación calidad/precio. En cada una os ponemos los valores que les da la web Ratebeer (tanto en general como en estilo) y la app Untappd. Y luego nuestra media ponderada (sobre 100) y su relación calidad/precio (sobre 10).

Mejores (y peores) cervezas de importación del supermercado

Abridor Catapulta-Chapas

Bueno, “Catapulta-Chapas” es un nombre que nos hemos inventado para este abridor. Más bien funciona por el sencillo principio de la palanca (para ser concretos, palanca de primer genero), y los inventores lo llaman “Slap Cap”. Pero el funcionamiento es bien sencillo.

Usas un extremo del abridor para abrir la cerveza y podértela beber. Eso es lo más básico. Luego puedes poner la chapa sobre el otro (que tiene una marca para ello) y golpear para lanzarla por el aire en una trayectoria parabólica, determinada por la fuerza de tu impacto y la gravedad (siempre que consideremos la resistencia del aire como un valor nulo, o no pensemos lanzarlo tan lejos como para notar variaciones en el campo gravitatorio).

¿Os parece complicado? ¡Seguro que si sois no-tan-jóvenes os tirasteis horas jugando al “gorilla.bas”! Bueno, y si no queréis haceros los viejunos, también sirve el Angry Birds. ¡Pero el tiro parabólico lleva con vosotros mucho tiempo!

Así que ya es hora de aplicarlo a cosas útiles como en Beer Pong, el echar carreras de chapas con los amigos, o el intentar acertar con ellas a cualquier objeto (como nuestra diana magnética) o encestarlas en el jarrón del salón. ¡Todo un mundo de diversión al alcance de un golpe de tu mano!

The Crafty Brewing Irish Lager

Uno de nuestros supermercados favoritos (por sus ofertas de bazar, y de vez en cuando por traer buenas cervezas) tiene habitualmente una selección media de cervezas en la que cabe destacar alguna artesana española y su gama Crafty hecha en por Rye River Brewing Company en Irlanda. De estas alguna está buena, y otras, no tanto.

El caso de hoy es de los segundos. Una rubia muy clara, rollo dorado pajizo, y muy carbonatada, con mucha espuma blanca que es esponjosa y tiene buena persistencia. El aspecto es el de cualquier rubia que puedas encontrar, no está mal.

Huele a paja y a lúpulo herbal seco (lleva Tettnanger y Hersbrucker, con un perfil clásico) que le da un toque de autenticidad. Puedes oler los ingredientes, cosa que se agradece. Pero ahí acaba lo bueno, porque también tiene un toque quemado, a lacre o incienso, que se repite en boca estropeando la sensación.

No la hace una mala cerveza, ya que el resto está bien. Y el precio por el medio litro de 5,0% ABV no está mal. Pero de esta variedad no repetiríamos. La estrella del Lidl sigue siendo su Festbier, de la que recomendamos comprar cajas.

“Mi opinión en un Tweet:” Las lager, mejor que vengan de Centroeuropa. Nota: Insuficiente.

The Beer Times (282)

Dominical suplemento de noticias sobre cerveza. Aquí puedes leer el periódico The Beer Times.

Como cada final de semana, traemos el dominical que contiene solamente enlaces sobre cervezas.

Música de Anuncio: Someday, Someway

Un poco tarde, por problemas técnicos con los ordenadores, pero la entrada de hoy llega ya a vuestras pantallas. No podemos no publicarla. Habría salido algún día, de alguna manera, antes o después. Que es lo que viene a decir la canción que hoy rescatamos de un anuncio de cerveza de la televisión.

Y con este tema os dejamos, que os estaréis preparando para salir de fiesta. Disfrutad de la cerveza con moderación (para evitar los excesos y sus consecuencias) y bailad un poco con Marshall Crenshaw y su canción Someday, someway.

To Øl Black Ball

¿Os acordáis de las Black IPA? Bueno, parece que pasaron de moda. ¡Y antes de que os echéis encima, ya, ya sabemos que algunos aún las hacen! Pero NO están de moda, oye. Ahora se llevan las IPAs turbias (y turbio más malta oscura igual a barrillo, no tan fácil de vender). Lo que sí que se sigue llevando es el unir lúpulo a espuertas con lo negro, pero en cosas como esta Porter.

To Øl Black Ball Imperial Porter
Desde Dinamarca y cargada de lúpulo americano (Cascade, Centennial, Simcoe) y alcohol (8% ABV), reventando todos los estándares que puedas tener sobre las Porter (de la tradición inglesa), tienes esta cerveza negra bien opaca, con una espuma de color marrón, abundante y muy compacta, de persistencia media.

El aroma es intenso a lúpulo y el sabor es bien amargo. Pero no por ello es una IPA, sino que está llena de notas de chocolate y caramelo, café y regaliz, y otros sabores de las maltas oscuras. Y eso en las Black IPA nunca nos ha parecido bien (y por eso echamos tanto de menos la Libertine Black Ale, que es la que mejor lo logró, era como beber lúpulo a oscuras).

El maridaje es complejo, ya que junta mucho la vertiente lupulada con la de petrolaco. Pescados a la parrilla, cosas con salsa barbacoa, quesos intensos… Pero lo acompañes con lo que quieras… siempre en copa que concentre olores y a una temperatura de servicio “alta”, unos 8-10 ºC.

“Mi opinión en un Tweet:” No tengas miedo a meter la bola negra, si es en el momento adecuado ganas. Nota: Sobresaliente bajo.