Los aromas que desprenden son dulces, ricos y agradables, muy frutales. El sabor es también dulce, con un toque cremoso en el paladar y un ligero regusto a licor. Es muy densa y potente. Me gusta. Compensada queda la ligera decepción de su hermana mayor.
Para degustarla se recomienda copa de cáliz, una temperatura de servicio de 10 a 12 ºC y acompañar de carnes y guisos si la abres a la hora de la comida. Y si te gustan las Dubbel, puedes disfrutarla sin miedo ya que, incluso pese a su segunda fermentación en botella, sólo tiene 6,3% ABV.
“Mi opinión en un Tweet:” Una Dubbel muy buena, rica y bebible. Nota: Notable alto.
Esta entrada me recuerda cuando hace un par de años visité con unos amigos la Abadía de Floreffe, tiene poco que ver y lo que es la iglesia la estaban reconstruyendo. Tenían un bar en donde servían las Floreffe, nos fuimos directos a por esta Doble. Me pareció como a ti una muy buena cerveza, desde entonces es una de las pocas que de vez en cuando me gusta repetir. En cuanto a la fabricación ya sabemos que la Floreffe no se fabrica en la propia abadía con el mismo nombre sino en la Lefebvre Br., pero bueno...
ResponderEliminarEn esta ocasión voy a discrepar, a mi la Floreffe no se por que la vez que la probé me resulto incluso algo empalagosa... y no he vuelto a catarla. Quizás deba darla una segunda oportunidad.
ResponderEliminarLo curioso es que justo ese mismo día fuí a un bar donde la tenían de barril... y me la pusieron y era super clara, cristalina, nada "dubbel" o nada como te lo esperas (Aunque de sabor estaba bien).
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