Esta cerveza nacida en el sótano de un pub de Vermont en 2003, se encuentra en el top 3 de IPAs con más renombre para la mayoría de fanáticos del lúpulo (especialmente americanos, aunque últimamente también del resto del planeta). Junto a las dos Pliny de Russian River, forma parte del imaginario cervecero craft desde hace años. The Alchemist, además, es considerada de facto creadora del estilo New England IPA / Vermont IPA, tan en auge, pese a que a ellos mismos no les gusta mucho esta definición.
De casualidad y carambola, nos hemos podido agenciar una de estas cervezas. Ha sido probada muy fresca, aunque desconocemos si ha mantenido la cadena de frío al largo del viaje. Este es un tema en el que se insiste mucho desde the Alchemist, y todos los vendedores autorizados de Heady Topper deben mantener la cadena de frío desde la fábrica hasta la venta, pasando por supuesto por la tienda. Esto aparte, veamos cómo se puede definir.
El color apenas lo vimos porque, tal como nos recomienda the Alchemist, la tomamos directa de la lata (somos bien obedientes) aunque echamos un poquito en un vaso para averiguar que es dorada pálida, turbia, con una espuma blanca persistente. Heady Topper es una cerveza enfocada al lúpulo (en su mayoría al Simcoe). Tiene una entrada cítrica y floral, amable, con bastante presencia de levadura (ésteres de piña), que la hace sentir espesa. La malta compensa a nivel de paladar, aportando un agradable dulzor, pero a nivel de sabor no pasa de un toque a miga de pan fresco. El final es notablemente amargo, pero no incómodo.
Esta Doble IPA con un 8% ABV destaca por ser muy redonda, con un amargor perfectamente medido, muy agradable de beber y de trago peligrosamente sencillo. Este cuerpo y sutil dulzor maltoso acompañado del lúpulo, casi balsámico, que se expande en la boca y va haciéndose más agradable a cada trago, creemos que puede ser su secreto. Es una cerveza espectacular, pero tan espectacular como otras IPAs y DIPAs que hemos podido probar con mucho mejor precio y disponibilidad (aquí, porque el precio en Vermont es más que justificado).
“Mi opinión en un Tweet:” Para probar una vez en la vida, pero para no repetir a menos que vivas allí. Nota: Sobresaliente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario