Cuando hace unos meses nos preguntábamos si era buena idea hablar también de las cervezas que no nos habían gustado (y obviamente, hablar mal de ellas), hubo tres cosas que nos hicieron decidirnos. Una, la opinión de la gente, que nos dijo que quería oírlo. Dos, la Santa Margarida de Trigo. Y tres, esta cerveza.
Según lo que promete, es una cerveza del tipo Schwarz (negra alemana), de monasterio. Cuando la sirves es negra, con espuma abundante. Todo parece ir bien.
Hasta que la pruebas. Y entonces el sabor dulce te machaca. Y empiezan a pasar por tu cabeza cosas como “refresco de malta”, “cerveza de raíz”, jengibre, zarzaparrilla, y otras cosas más obscenas que no decimos por miedo a la censura. Bueno, si te gusta el refresco “Ponimalta” a lo mejor esto te gusta. Pero no lo llamaría cerveza.
Y ahí no acaba lo malo. Sólo tiene 3,9% ABV, así que no puedes emborracharte para olvidarlo. Y encima la botella es de 0,5 L, con lo cual tienes sufrimiento para rato. No recomendamos ni vaso ni maridaje. Recomendamos no probarla.
“Mi opinión en un Tweet:” Refresco de malta dulce con poco alcohol. Ni para niños ni para adultos. Nota: Muy deficiente.
Totalmente de acuerdo. Desde: Cervezas y Cañas
ResponderEliminarTambién picasteris y la probasteis? pobres!
Eliminar