Antes de irnos de vacaciones elegisteis (dentro de la sección de Demócatas) esta cerveza para ser catada y reseñada. Nosotros aprovechamos para beberla en el IPAday. Pero luego nos fuimos de descanso y no pudimos escribirla. Así que es lo primero a lo que nos hemos puesto a la vuelta.
Esta es la IPA básica de la gama de las cervezas Villa de Madrid. De color dorado anaranjado, levemente opalina, coronada por una espuma blanca, de tamaño medio y persistencia media-baja, pegajosa en las paredes del vaso.
Presenta aroma cítrico, afrutado. En boca muestra el lúpulo con amargor e intensidad, persistente pero no agresivo. El paso en el trago es rápido, dejando un regusto leve, seco. Con algo de astringencia al final, pero no desagradable. Todo ello acompañado de un buen cuerpo gracias a las maltas, que le dan toques de caramelo.
Tiene 6,5% ABV, lo que la pone en el límite de cerveza de consumo continuado. Pero su perfil correcto, su carbonatación agradable y que en general está buena, la hacen una buena elección para casi cualquier momento. Acompañando un bocata de calamares, por ejemplo.
“Mi opinión en un Tweet:” Si te bebes un par, te sales de tu baldosa. Baila con moderación. Nota: Bien alto.
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