Hay veces que las cervezas tienen recuerdos florales. Es muy bonito (aunque no muy frecuente) oler una cerveza y que te traiga a la memoria un paseo rodeado de exuberantes flores de pétalos abiertos. A veces pueden ser a lavanda, pero hoy nos vamos a ocupar más de cuando nos recuerda a las rosas (u otras rosáceas).
El aroma a flores suele provenir de los aceites esenciales del lúpulo (o de algún adjunto), y si nos recuerda a las rosas de una rosaleda, puede estar causado o bien por el alcohol fenetílico o bien por el acetato de feniletilo (que le da un toque a miel también).
Es algo ideal en una cerveza, sobre todo como regalo de conquista. A cualquiera de las personas (incluyendo los Becarios, que son un poco menos que personas) que escribimos en El Jardín del Lúpulo nos conquistas antes con una cerveza con aromas a flores que con un ramo de floristería.
Pero, como dice el refrán inglés, hay que acordarse y sacar tiempo para pararse y oler las rosas. Por eso te recomendamos buscar algún jardín florido (en este, el “Del Lúpulo”, abunda la cerveza pero no las flores) y quedarte bien con el aroma para luego reconocerlo (a no ser que tengas la suerte de que alguien te traiga un ramo a casa).
Bueno, aqui en argentina hay una cerveceria que hace una "ipa con petalos de rosas"
ResponderEliminar¡Pues esa seguro que lo tiene!
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