Desde El Jardín del Lúpulo la cuestión de la interacción entre medicamentos y cerveza siempre nos ha preocupado mucho. Y como ahora se habla tanto y debate sobre la homeopatía, no queríamos dejar pasar la oportunidad de dar nuestra opinión y argumentar un caso práctico sobre esta medicina ¿alternativa? o ¿pseudo? ciencia.
Para los que no tengan muy claro qué es, el principio básico de la homeopatía (del griego hómoios, “igual”, y páthos, “dolencia”) es tratar las enfermedades con lo mismo que las causa o que produce esos síntomas. “Lo similar cura lo similar”. Eso en el mundo cervecero anglosajon tiene hasta una expresión: “Hair of the dog that bit you”, que viene a decir que la resaca se cura bebiendo más alcohol.
Estás prácticas tienen sus riesgos si tomas demasiada “medicina”. Puede que un Bloody Mary sirva como reconstituyente… Pero dudamos que meterte una Brewdog Tokyo* te vaya ayudar a mejorar los síntomas de la resaca. Samuel Hahnemann, el inventor de la homeopatía, tenía esto claro, por lo que inventó que había que hacer una disolución del principio homeopático en agua. Lo curioso es que cuanto más lo diluyas en agua y más repitas este proceso, más potente se supone que es el resultado.
Obviamente, nosotros, con nuestro pensamiento crítico, independiente e iconoclasta y amantes como somos del método científico (gracias a una educación de calidad en la enseñanza pública)… decidimos no creérnoslo sin más. Y antes de apoyarlo, hacer la prueba aprovechando que, un día más, nos levantábamos con resaca.
Por lo que preparamos una disolución 30C (las recomendadas por el tal Hahnemann -ahora os explicamos cómo se hacen…-) diluyendo UN CENTILITRO de cerveza (Imperial Stout, la causante de nuestros males) en UN LITRO de agua mineral. Esto hace una disolución de factor 100, 1C (una parte de producto por cada cien de solución).
Luego, cogimos UN CENTILITRO de esta solución y lo diluimos a su vez en OTRO LITRO de agua. Ya vamos por 2C, una parte por cada 10.000. Y así repetimos el proceso de diluir un centilitro de cada en un nuevo litro de agua otras 28 veces, hasta 30C (una parte cada 10 elevado a 60).
Obviamente, fuimos nuestros propios conejillos de indias en este ensayo con humanos. Y cada uno de nosotros se bebió un litro de la disolución que llamamos “Cerveza Científica Contra 30C”. ¡Y los resultados nos sorprendieron! Aunque habíamos oído siempre que la homeopatía es una patraña, una pseudoterapia o pseudomedicina, un invento para sacar los cuartos a los incautos… ¡El bebernos la CCC30C nos alivió los síntomas de la resaca causados por la deshidratación debida al alcohol!
Por lo que desde El Jardín queremos apoyar el uso de la disolución homeopática registrada por nosotros mismos CCC30C para combatir la resaca. (Y, si aún no has pillado el chiste, beberte un litro de agua te va a hacer el mismo efecto, con menos trabajo. ¡Pruebalo! Pero para todo lo demás, usa medicamentos cuyos efectos positivos estén demostrados, por favor.)
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