De esta cerveza ya os trajimos su diseño hace casi dos años, cuando estrenamos la sección de Juzgado de Etiquetas. Pero hoy, con la parsimonia que nos caracteriza huyendo de traer novedades efímeras, publicamos por fin lo que es la reseña de esta cerveza, ahora que está asentada.
Y os hablamos de esta primera cerveza “especial y moderna” de nuestra marca asentada en Valladolid favorita actualmente. Unos chicos jóvenes y con empuje que están en todo el meollo del panorama cervecero pucelano, y desde muchos ámbitos.
La cerveza que hoy nos ocupa es una IPA de 6,4% vol. y 43 IBU de color amarillo dorado, con matices anaranjados brillantes y una leve opacidad. La corona una espuma blanca de tamaño medio y persistencia media, pegajosa.
El aroma es bastante atractivo, frutal, cítrico y tropical (lleva Simcoe, Mosaic y Columbus) pero el amargor luego no es muy intenso. Está bastante equilibrado con el dulzor de las maltas. Y en general resulta ligera, sin abotargar tampoco su alcohol.
Por lo que no podemos menos que recomendarla como una buena cerveza tanto para introducirse en el mundo de las IPA, a medio camino entre algo de corte clásico y de tendencia moderna, y entre el perfil más especializado y una cerveza apta para novatos.
“Mi opinión en un Tweet:” Todo también es terrible (formidable) en esta cerveza. Nota: Notable Alto.
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