Seguimos las reseñas invernales que acostumbramos a hacer en esta temporada navideña con una cerveza belga (que son habitualmente las cerveceras que más se prodigan con este estilo) de la Brouwerij Dilewyns.
Esta cervecera, aunque parece de corte muy clásico (por sus recetas y estilos, así como por su sobriedad) en verdad fue fundada en este siglo, y montó su fábrica bajo el control de la familia Dilewyns ya en 2011, hace una década solamente.
La Vicaris de invierno es de color marrón muy oscuro, rojizo pero casi rozando el negro, bastante opaca. La espuma está teñida del mismo tono y es abundante y esponjosa, además de compacta, pegajosa y persistente. ¡Un lujo de copete!
El aroma es intenso, a malta, licor, fruta pasa, caramelo, regaliz e higos. Y el sabor es dulce, aunque no aparenta demasiado cuerpo. Empieza rica y redonda, pero el final es flojo, en el sentido de que no tiene la persistencia en boca esperada.
Sin embargo, sus 10% ABV sí que se notan. Es potente y fuerte y hace que tus mejillas se calienten. Pero, ¿no es eso lo que esperamos de una cerveza diseñada para cuando los días son cortos y las temperaturas descienden por los rayos oblicuos del sol?
“Mi opinión en un Tweet:” Ahorra en calefacción, bebe cerveza de invierno. Nota: Bien alto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario