Con este nombre que nos recuerda a partes iguales a “Sabroso” y “Sabo”, traemos una nueva incorporación a esta sección en la que llevamos ya reseñados más de medio centenar de variedades de lúpulo diferentes. Por suerte, en el creciente mundo de las IPAs la I+D sigue a tope y siempre aparecen variedades nuevas para que no se quede seco este jardín.
Y nuevo es el Sabro, con origen en un lúpulo de Nuevo México y “número de serie” HBC 438, que entra dentro de los lúpulos de moda actuales, clasificado como lúpulo aromático (pese a entre un 12 y un 16% de alfa-ácidos) por los aromas frutales, cítricos (coco y mandarina, destacan, por ejemplo) o a menta y crema.
Por todo esto, es un lúpulo ideal para cervezas con un perfil como las IPAs, sobre todo en versiones modernas como las NEIPA o las Cold IPA (si llegan a ponerse de moda aquí, claro). Lo difícil es encontrarle sustituto, aunque hablan de mezclar El Dorado, Cashmere o Sorachi Ace... ¿Lo habéis probado?
Tampoco es fácil buscarlo entre las cervezas reseñadas, ya que no lleva usándose más que un par de años y casi ninguna elaboración que hayamos visto que lo usa ha llegado a hacer un segundo lote para poderla reseñar en El Jardín. Pero si buscáis, SanFrutos, Península o Yria tenían cervezas hace poco en el mercado con Sabro… ¡Suerte!
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